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| Twitter Liverpool FC |
No fue la victoria más brillante. Tampoco el mejor partido de la temporada. Sin embargo, el sábado el Liverpool logró una victoria muy valiosa en el asalto al título.
El equipo:
Desde el principio se vio la importancia que tenía este partido para Klopp, que alineó al mejor equipo posible. Incluso con un vital encuentro el miércoles contra el Red Bull Salzburgo, Klopp decidió no experimentar.
Cambios: "64" Origi por Henderson, "87" Milner por Firmino y "90" Chamberlain por Mané.
Crónica:
Los primeros minutos del partido dejaron claro que la visita a Bramall Lane no iba a ser ningún paseo para el Liverpool. Los de Klopp se mostraron incómodos en los minutos iniciales y con pocas opciones en ataque. El Sheffield fue quien tuvo las primeras ocasiones del encuentro, pero el tiro de McBurnie fue directo a las manos de Adrián y el golpeo de Robinson salió desviado.
No fue hasta el minuto 25 que el Liverpool tuvo su primera llegada realmente peligrosa: una pérdida de Stevens fue aprovechada por Salah, pero su tiro con rosca se marchó fuera. En el 33 llegaría una ocasión aún más clara a través un pase largo de van Dijk que Mané, prácticamente solo, no acertó a convertir en gol. Su golpeo se marchó muy arriba.
Poco antes del descanso llegaría la última oportunidad de la primera parte a raíz de un contraataque de Salah. No obstante, el marcador no cambió ya que el tiro de Mané salió rechazado por el palo.
El Liverpool afrontaba el segundo tiempo con cierta ansiedad por romper de una vez el empate, pero el partido seguía atascado. De hecho, entró Origi por Henderson buscando más pólvora en ataque. En el minuto 64 una buena estirada de Adrián evitó que un tiro de Norwood se convirtiese en el 1-0.
Solo cinco minutos después llegó el ansiado desempate para el Liverpool: un balón muerto al borde del área fue rematado de primeras por Wijnaldum. Su tiro fue directo a las manos de Henderson, pero el que está siendo una de las revelaciones de la Premier falló inesperadamente y se le escurrió la pelota.
Después de ese error, Henderson salvó en dos ocasiones a su equipo negándole el gol a Salah en los minutos 71 y 77. El Sheffield United no se rindió y buscó hasta el final el empate, con una ocasión clarísima para Clarke en el 84, que solo tenía que empujar el balón frente a un Adrián casi batido.
Tras esta victoria el Liverpool suma ya siete partidos y siete victorias en Premier, siendo líder con cinco puntos de ventaja sobre el Manchester City.
Los primeros minutos del partido dejaron claro que la visita a Bramall Lane no iba a ser ningún paseo para el Liverpool. Los de Klopp se mostraron incómodos en los minutos iniciales y con pocas opciones en ataque. El Sheffield fue quien tuvo las primeras ocasiones del encuentro, pero el tiro de McBurnie fue directo a las manos de Adrián y el golpeo de Robinson salió desviado.
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No fue hasta el minuto 25 que el Liverpool tuvo su primera llegada realmente peligrosa: una pérdida de Stevens fue aprovechada por Salah, pero su tiro con rosca se marchó fuera. En el 33 llegaría una ocasión aún más clara a través un pase largo de van Dijk que Mané, prácticamente solo, no acertó a convertir en gol. Su golpeo se marchó muy arriba.
Poco antes del descanso llegaría la última oportunidad de la primera parte a raíz de un contraataque de Salah. No obstante, el marcador no cambió ya que el tiro de Mané salió rechazado por el palo.
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El Liverpool afrontaba el segundo tiempo con cierta ansiedad por romper de una vez el empate, pero el partido seguía atascado. De hecho, entró Origi por Henderson buscando más pólvora en ataque. En el minuto 64 una buena estirada de Adrián evitó que un tiro de Norwood se convirtiese en el 1-0.
Solo cinco minutos después llegó el ansiado desempate para el Liverpool: un balón muerto al borde del área fue rematado de primeras por Wijnaldum. Su tiro fue directo a las manos de Henderson, pero el que está siendo una de las revelaciones de la Premier falló inesperadamente y se le escurrió la pelota.
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Después de ese error, Henderson salvó en dos ocasiones a su equipo negándole el gol a Salah en los minutos 71 y 77. El Sheffield United no se rindió y buscó hasta el final el empate, con una ocasión clarísima para Clarke en el 84, que solo tenía que empujar el balón frente a un Adrián casi batido.
Tras esta victoria el Liverpool suma ya siete partidos y siete victorias en Premier, siendo líder con cinco puntos de ventaja sobre el Manchester City.
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