La muralla se derrumba

No cabe ninguna duda de que el Liverpool se encuentra en un gran momento. Los "Reds" son líderes invictos en Premier con ocho puntos de ventaja sobre el segundo, con la clasificación a octavos de final en Champions encarrilada y vivos en la Carabao Cup. No cabe duda de que el proyecto de Jürgen Klopp en Anfield está en su punto álgido. Sin embargo, hay un aspecto del equipo que resulta un tanto preocupante entre tantas alegrías: los goles encajados.


Si algo había representado la mejoría del Liverpool la pasada temporada era la solidez defensiva obtenida tras varios años siendo el quebradero de cabeza del equipo. El fichaje de van Dijk en el mercado invernal de 2018 dio un gran impulso a este aspecto, pero fue la llegada de Alisson en verano el que lo consolidó. De esta forma, el Liverpool se caracterizó por ser un equipo con pocos goles encajados.

Por eso, resulta tan desconcertante que esta temporada el equipo lleve sin mantener una portería a cero desde el 28 de septiembre (0-1 en Sheffield) y que lleve encajados 26 goles en 21 partidos. Inicialmente parecía que la razón principal era la ausencia de Alisson, pero desde que el brasileño se ha recuperado de su lesión, el problema persiste. Esta temporada, independientemente de que gane, pierda o empate, el Liverpool apenas consigue mantener una portería a cero. La pasada temporada, a estas alturas, sólo se habían encajado 13 goles.


Claro está, que limitar este problema a los porteros es injusto. Es evidente que la labor defensiva es también importante en este aspecto y parte de la culpa recae en la zaga. Sea como sea, no deja de ser una estadística, pues los resultados hasta el momento son mejores que nunca.

Comentarios

  1. El Liverpool está ganando demasiados partidos a la épica. Si no hay solidez atrás esto empezará a pasar factura. Tenemos que empezar a defender con balón cuando llevemos la ventaja.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario